Hoy, todos los alumnos del colegio nos
hemos llevado nuestra maceta con perejil. Ahora nos toca en casa seguir
cuidándola. Hay que regar la planta con frecuencia y con poca
cantidad de agua, pues la tierra tiene que estar húmeda pero nunca debemos
dejar que se encharque.
La planta tiene que recibir luz, pero nunca estar al sol. Tampoco soporta
heladas y temperaturas frías, por lo que es una planta perfecta para estar
dentro de casa. Se puede colocar cerca de una ventana por la que la luz entra
varias horas al día.
Si la planta tiene hojas secas hay que
quitárselas para que crezca más fuerte.
Como somos unos expertos hortelanos, la
cuidaremos muy bien y pronto lograremos aderezar nuestras próximas comidas.
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